El frente de la Guerra Occidental de Padilla del Ejército Nacional de Liberación (ELN) ha hecho un anuncio significativo en relación a la seguridad en la región. Desde el día viernes 2 de mayo a mediodía, se llevará a cabo la implementación de una Nueva 72-Hora Strikes para Baming en el departamento de Chocó. Este período contempla una serie de medidas que impactarán directamente la movilidad y tranquilidad de la población local.
Los partidarios del ELN han señalado que tienen planes para extender esta acción hasta el próximo lunes 5 de mayo a las 12:00, lo que marca un momento crítico para la comunidad en medio de la situación actual.
El anuncio fue realizado mediante una declaración pública, donde se subrayó el compromiso de evitar afectar a los civiles en los conflictos armados, a pesar de la inminente confrontación respaldada por fuerzas “paramilitares”. Según el ELN, este grupo está conformado por alrededor de 400 individuos y son liderados por un personaje conocido como “piernas puras”, a quienes consideran mercenarios y que supuestamente provienen de la comunidad Sytrao, ubicada en el noreste de Colombia.
En este contexto, el grupo armado ha destacado la conexión que estos “paramilitares” mantienen con las Fuerzas Armadas y clanes políticos que tienen influencia en las áreas altas, medias y bajas de Baudó. Esta revelación resalta la complejidad de las relaciones de poder en la región, donde la violencia y las confrontaciones son moneda corriente.
Eln desempleo armado en Chocó. Foto:Fuerzas militares
Los detalles de la huelga indican que estará enfocada principalmente en las inmediaciones del río Baudó y sus afluentes, creando restricciones en la movilidad de los habitantes. “Cada tipo de movilidad estará prohibido desde el 2 de mayo a las 00:00 hasta el 5 de mayo a las 12:00,” advirtió el frente, lo cual podría implicar consecuencias graves para el transporte y las actividades económicas en la zona.
Las autoridades están investigando un video en el que los miembros de ELN proclaman su presencia en todo el Atlántico. Foto:Captura de pantalla
El ELN ha explicado que su decisión de implementar esta huelga se ha tomado como respuesta a la presencia de grupos armados que se consideran paramilitares invadiendo su territorio en la subregión de Baudó. En su comunicado, hicieron énfasis en que el paramilitarismo, bajo el mando de “piernas limpias”, ha establecido rutas de tráfico de drogas y zonas de almacenamiento en el Pacífico colombiano.
En particular, esta redirección de actividades criminales se centra en el sector que abarca el alto Baudó, a través de los ríos Cogucho y Chorí, ubicados en el municipio de Nauquí. Esta situación plantea retos significativos para el control del territorio y la seguridad de los pobladores locales, quienes viven bajo la sombra de estos actos violentos.
Desempleo armado en una declaración de Chocó Foto:Archivo privado
De acuerdo al grupo guerrillero, se ha documentado una serie de abusos que las comunidades han sufrido a manos de estos grupos, que incluyen agresiones físicas, amenazas, robos y abuso de menores, sumando un sinfín de prácticas que vulneran la integridad y dignidad de los seres humanos en la región.
Desempleo armado en una declaración de Chocó Foto:Archivo privado
El 29 de abril, ya se había registrado un enfrentamiento en la comuna Pie de Pato, Alto Baudó, donde una embarcación perteneciente al clan del Golfo fue atacada. Este altercado dejó como resultado tres personas fallecidas y tres heridas, evidenciando la creciente intensidad de la violencia en la región.
Hasta este momento, no se ha recibido respuesta por parte del gobernador del departamento, Nubia Carolina Córdoba, respecto a este nuevo impacto de violencia. Este acontecimiento se suma a un contexto ya tenso, marcado por el secuestro del director de la corporación para el desarrollo de Chocó, Codchocó, Arnold Alexander Rincón el 26 de abril, lo que ha incrementado las tensiones y la incertidumbre en la comunidad.
No es la primera vez que el ELN realiza una huelga. Hay que recordar que previamente, en febrero del año pasado, anunciaron otra de estas medidas, la cual se llevó a cabo del 18 al 21 de febrero de 2025.
Este tipo de acciones están generando un clima de inestabilidad y preocupación en la región, donde las comunidades se sienten cada vez más amenazadas por la violencia y la falta de respuesta institucional.