Según la inteligencia, es el alias de ‘compadre’, que sirvió como comandante de los comandos fronterizos en Ecuador.
Escritura web/ln
Tras el trágico asesinato de once valientes miembros del ejército ecuatoriano a manos de los “comandos fronterizos”, una facción disidente relacionada con las FARC, un hecho ocurrido en la zona del Punino Bold, que se encuentra entre las provincias de Napo y Orellana, las autoridades encargadas de la seguridad en Ecuador han hecho importantes avances en la identificación de los criminales involucrados en este ataque. Gracias a un esfuerzo coordinado y a un intercambio crucial de información con diversas agencias de inteligencia y seguridad de la nación vecina, se ha logrado rastrear a uno de los líderes de esta organización criminal.
De acuerdo con datos recabados, se confirmaron los detalles sobre un individuo conocido por el alias “Compacen”, quien desempeñaba el rol de comandante de los comandos fronterizos en el Ecuador. La relevancia de esta figura se ha vuelto más clara a medida que se profundiza en las investigaciones que rodean su actividad delictiva, la cual estaba centrada en el control de operaciones ilegales de minería dentro del territorio, además de llevar a cabo extorsiones a los mineros que operan en la región, un acto conocido localmente como “vacunas”.
Este ‘Compadre’, como se le conoce comúnmente, había establecido alianzas estratégicas con el grupo armado conocido como Los Lobos organizados, lo que le permitió consolidar su poder dentro de esta red delictiva. Con una distribución significativa de recursos, este individuo estaba al mando de al menos 30 hombres que estaban armados hasta los dientes con armas de calibre 5,56 mm, así como con lanzados, explosivos, y otros sofisticados equipos de combate. Tal arsenal le otorgó una impresionante capacidad para realizar operaciones coordinadas y mantener el control en su territorio.
Además de su impresionante armamento, es digno de mención que este grupo disponía de equipo avanzado de comunicación y drones, lo cual les daba la ventaja de realizar vigilancia aérea y monitorear los movimientos del personal militar que pudiera estar operando en la zona. Este nivel de sofisticación tecnológica subraya la seriedad y la intensidad del conflicto que enfrenta Ecuador en su lucha contra el crimen organizado.
Las autoridades continúan su esfuerzo por desmantelar estas estructuras criminales que amenazan la seguridad y el bienestar de la región. Con la colaboración de entidades internacionales y locales, se espera que la captura de líderes como “Compacen” y la desarticulación de sus redes permitirá restaurar la paz y la legalidad en las áreas afectadas. La situación sigue siendo delicada, pero el compromiso de las fuerzas del orden ecuatorianas para revertir esta situación es más fuerte que nunca.
Con información de: Blu Radio