Por Eduardo Méndez, presidente de Independiente Santa Fe, ha ratificado en una reciente reunión que actualmente posee el 80% de las acciones del club. Este anuncio se dio en un encuentro con representantes de los aficionados, con el fin de abordar y aclarar múltiples temas relacionados con las recientes noticias deportivas y financieras que involucran a la institución.
Durante esta reunión, el presidente Méndez explicó que su participación en el club incluye también los porcentajes que anteriormente estaban en manos de César Pastrana y César Perdomo. En este contexto, enfatizó que todas las decisiones relacionadas con el equipo han sido revisadas cuidadosamente por él y su equipo directivo.
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En medio de la insatisfacción que ha generado la campaña irregular del equipo, algunos aficionados le plantearon la razón por la cual no estaba considerando la posibilidad de vender su participación en el club. A lo que Méndez respondió que ha recibido diversas propuestas, pero ninguna de éstas ha venido acompañada de un respaldo económico significativo. “La equidad costó 16 millones de dólares. Santa Fe vale más de 50 millones. Nadie ha traído dinero sobre la mesa“, aseguró.
Además, dejó claro que no tiene intención de renunciar a su puesto. A pesar de la presión ejercida por algunos sectores de la afición, el presidente reafirmó su compromiso de continuar al frente mientras mantenga el control en la institución.
Durante el desarrollo del partido, se trataron otros temas sensibles que preocupan a los seguidores del club. Los aficionados cuestionaron el bajo rendimiento mostrado por algunos jugadores, a lo que el presidente respondió diciendo que había convocado a cuatro referentes del equipo para exigir mayor compromiso en el campo.
Sin embargo, explicó que no podía sancionar a un jugador por un bajo rendimiento debido a que esto sería considerado ilegal. “No se puede medir si corre o camina. Se les paga puntualmente, pero el compromiso depende de ellos”, añadió Méndez.
Santa Fe y su desafío financiero
En el ámbito de las finanzas, el presidente reveló que la deuda del club se aproxima a los 12,000 millones de pesos. Si bien algunos elementos de esta deuda son negociables, también mencionó que hay alrededor de tres sanciones impuestas por la FIFA que dificultan el registro de nuevos jugadores.
De estas sanciones, dos están relacionadas con el cuerpo técnico anterior, mientras que la tercera se refiere a la venta de Dylan Borrero. En total, el club necesita generar el dinero necesario para cubrir más de 8,000 millones de pesos antes de que finalice el mes de mayo.
El presidente Méndez subrayó que los ingresos provenientes de los suscriptores solo han sido suficientes para cubrir dos meses de nómina. Aclaró que las operaciones del club dependen principalmente de los patrocinios, los derechos de televisión y otros recursos propios. “He usado mis bienes y negocios para cumplir con las deudas”, reconoció con sinceridad.
Finalmente, Méndez cerró la charla remarcando su firme intención de continuar en su cargo. Hizo hincapié en que Santa Fe requiere estabilidad para poder avanzar y prosperar en su futuro. A pesar de la presión de los aficionados que exigen resultados positivos, transparencia y una profunda reestructuración en el club, el presidente se mostró decidido a seguir adelante.
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