La esperanza de la posibilidad de trabajo se ha convertido Una tragedia para tres amigos que se mudaron de Cartagena a Sierra Nevada de Santa Marta.
Daniel Manuel Julio Anaya, Merquis Quintana García y Saraith del Carmen Torres Encontraron sus muertos, esposas y con señales de tortura, En una zona montañosa de acceso difícil cerca de Corregimiento Palmor, Ciénaga Commune.
El escenario estaba calificado como masacre por las autoridades. Los cuerpos, encontrados el 30 de mayo en el sector conocido como “La Bodega”, presentaron muchas heridas de bala y signos obvios de violencia. Durante más de una semana, los cuerpos permanecieron no identificados en la medicina legal Santa Marta, siempre que los familiares, impulsados por la desesperación, decidieron familiarizarse con las características físicas de los cuerpos encontrados. La identificación finalmente se confirmó esta semana.
Me dijo que era algo relacionado con su trabajo, que era solo cuestión de días. Nunca lo imaginamos
¿Qué hicieron en Magdalena?
Equipos de Ciminnal Foto:Archivo privado
De acuerdo con las versiones proporcionadas por los familiares, Tres amigos anunciaron que viajan al norte de Magdalena para cerrar un trabajo que les permitiría obtener ingresos.
“Me dijo que era algo relacionado con su trabajo, que era solo cuestión de días. Nunca lo imaginamos”, dijo Algado de Daniel Julio, quien se dedicó a la oficina de Llantería en Cartagen.
Saraith Torres, 40 años y la ciudadanía venezolana, también vivían en la capital de Bolívar. Según sus seres queridos, la mujer buscaba mejores oportunidades de trabajo, y si era necesario, expresó su disposición para trabajar en las zonas rurales.
Este triple asesinato se convierte en la primera masacre registrada en Magdalena en 2025.
Equipos criminales Foto:Archivo privado
La incertidumbre sobre el paradero de tres desaparecidos permaneció durante muchos días. Mientras que las familias alertaron a las autoridades sobre su desaparición, en las zonas rurales de Palmor, los campesinos encontraron cuerpos en un surco escondido en la vegetación. Cuerpo, esposas y con claros signos de uso físico, mostraron que no era un robo común, sino una premeditación.
Las autoridades no descartaron que las víctimas fueron engañadas de las falsas promesas, lo que las llevaría al lugar donde fueron asesinadas. También se examina si saben que tienen la intención de conocer a personas peligrosas y si su presencia en el territorio tenía un propósito diferente.
Nadie los devolverá, pero al menos queremos justicia. No puede ser que simplemente los maten y nadie sabe por qué
El coronel de la policía metropolitana, Jaime Ríos, anunció que una de las hipótesis más fuertes indica una posible relación de delito con las acciones de grupos armados ilegales que operan en esta región. “Estamos en el proceso de verificación de información, cámaras, contactos telefónicos y rutas de viaje”, dijo.
Este triple asesinato se convierte en la primera masacre registrada en Magdalena hasta 2025.. Este hecho reactivó las notificaciones en las comunidades de Sierra Nevada, donde las organizaciones sociales y los líderes comunitarios condenan el aumento de las amenazas y el desarrollo de estructuras armadas en áreas históricamente abandonadas por el estado.
“El miedo regresó a Palmra”, dijo el líder comunitario del área que solicitó reservar su identidad por razones de seguridad. “Vemos lo que sucederá, pero no podemos decir. No es solo un bollo o ruta: ahora hay una presencia de varios grupos que cuestionan todo. Y en el medio son civiles”.
Mientras la oficina del fiscal y la policía continúan investigando, los familiares de las víctimas se están preparando para aceptar los órganos en Cartaagen, entre la tristeza e indignación por la violencia, que aún secuestra la vida en los rincones más olvidados del país.
“Nadie los devolverá, pero al menos queremos justicia. No puede ser que simplemente los maten y nadie sepa por qué”, dijo el pariente de Merquis Quintana.
Además, seguimos cuidados por la salud del candidato presidencial Miguel Uribe
La salud de Miguel Uribe sigue siendo crítica Foto:
Roger Urieles, para la época de Santa Marta. En x @rogeruv